Alianza

Craig observa fijamente a Rhuddlan, estudia cada una de sus facciones incluso piensa que si el dijese que aquel tipo de cabellera rojiza es su hermano, nadie pondría en duda su palabra, es cuando Rhuddlan finalmente rompe aquel silencio de muerte.

 

 

-Es claro que no tienes idea de lo que está por venir, será una tempestad tan fuerte, que la furia de sus vientos podría desprender de raíz al sauce más tierno y flexible, será menester trasplantarlo a tiempo si queremos evitar que eso suceda-

 

Craig alza una ceja entiende  que Rhuddlan habla con palabras veladas para darle a entender algo que no puede  decir en ese momento, por lo que simplemente ordena callar a Rhuddlan

 

-¡Basta! es claro que solo divaga tu mente-

 

Cuando termina de hablar hay un largo silencio que ninguno de los dos quiso interrumpir, hasta que finalmente el carruaje freno su andar y un guardia abre la puerta de aquel carruaje

 

-Sr. Craig es claro que este sujeto está mal de sus facultadas no pude dejar de escuchar sus palabras sin sentido, yo recomendaría le enviara a un manicomio ahí es donde pertenece-

 

Craig sonríe y palmea al guardia.

 

-En efecto este hombre solo presenta peligro para sí mismo, sabes que me gusta cumplir con la ley aun a expensas de la familia por ello aún tengo que llenar una serie de documentos así que por que no te tomas el resto de la tarde, yo me encargo de mi hermano-

 

Aquel guardia hecha una mirada rápida a Rhuddlan y en efecto asume que aquel tipo era pariente de Craig

 

-Oh Sr no sabía que tenía un hermano, dudo que alguien de nosotros lo supiera aunque ya veo porque se lo guardo, descuide de mis labios no se enterara nadie-

 

Craig interrumpe al sujeto.

 

-Descuida sé que cuento con tu discreción así que toma este dinero como recompensa a tu lealtad-

 

El guardia  no se la piensa  dos veces para tomar aquel saco lleno de monedas y retirarse de inmediato, acto seguido Craig retiro las esposas a Rhuddlan

 

-Sigue como hasta ahora y no hables loquito-

 

Rhuddlan frunce el ceño y se limita a asistir con la cabeza en señal de afirmación, los dos cruzan por los pasillos de las instalaciones de Scotland Yard parando en la oficina de Craig

 

-Bien ahora dime que es todo eso de la tormenta que está por venir-

 

Rhuddlan miro a los ojos a Craig.

 

- Tal vez no lo logres entender pero la humanidad ya no pelea solo contra su prójimo asumo que ahora es cuando más vulnerable se encuentra-

 

Craig enrojeció de cólera e interrumpió.

 

-¡Demonios!  Basta de hablar con soliloquios-

 

Rhuddlan harto de sus desplantes le tomo por el hombro y con facilidad le hizo tomar asiento.

 

-Lo que se viene no puede pararse solo con la fuerza bruta,  requiero de tu influencia sobre la aristocracia, saber hasta dónde ha sido tomado el mando de las masas y sobre todo saber si es hum…- Rhuddlan aparta  la mano del hombro de Craig y toma distancia al oír como la puerta se abre de súbito, tanto Craig como Rhuddlan ven al guardia que horas antes había sido despachado con una moderada cantidad de dinero

 

-Sr. Craig disculpe mi modo de entrar pero le aseguro esto que voy a contarle le es de toda su incumbencia-

 

Craig separa de su lugar prestando atención al guardia.

 

-Dime ¿De qué se trata?-

 

El guardia aun agitado menciona  el apellido Mayfair

 

-He escuchado en una riña de cantina que le han mandado seguir por expresas ordenes de la Sra. Mayfair, a raíz de sus constantes pesquisas cerca de sus propiedades y una cosa más, entregue el dinero que me dio a uno de los ebrio a cambio de valiosa información-

 

Craig apresura al guardia.

 

-Anda di lo que sabes a cambio serás bien remunerado-

 

El guardia sigue  su relato.

 

-Párese que la Sra. Mayfair está interesada en una vieja biblioteca, se dice que los dueños están por ceder a la oferta por falta de recursos-

 

Craig despacha al guardia después de pagar su información quedando a solas nuevamente con Rhuddlan quien se dirigió a Craig.

 

-El dinero es una carta fuerte en este juego y Bianca Mayfair se ha convertido en una constante, te recomiendo seas el benefactor de los actuales dueños, inyecta el dinero para que lo sigan siendo y esperemos a ver la reacción de la Sra. Mayfair-

 

 

 

By Rhud